Alternativas a los ascensores convencionales

¿Qué alternativas a los ascensores convencionales podemos encontrar?, ¿Cuáles son sus ventajas? ¿Y sus inconvenientes?

Alternativas a los ascensores convencionalesSin duda la instalación de un ascensor se ha convertido en la principal forma de poder salvar los diferentes pisos de altura de cualquier tipo de edificio o vivienda de manera rápida y cómoda.

Aun así, en ocasiones existen casos en los que instalar un ascensor convencional resulta complicado técnicamente o una empresa complicada debido al alto coste económico.

Es en estos casos, es importante tener en cuenta que existen diferentes alternativas a los ascensores convencionales que pueden suponer una solución igual o incluso mejor, en función del tipo de necesidad.

Una de estas opciones serían los ascensores de velocidad reducida o también conocidos coloquialmente como ascensores unifamiliares, este tipo de elevadores se caracterizan por tener una estética muy similar a los ascensores convencionales, pero como su nombre indica, su velocidad se encuentra limitada a un máximo de 15 centímetros por segundo.

Aunque este punto pueda parecer un detrimento, confiere una serie de ventajas que hace que este tipo de elevador suponga una de las alternativas a los ascensores convencionales más instaladas.

Por una parte tenemos que el precio de los ascensores unifamiliares es sensiblemente menor debido principalmente a la menor complejidad del elevador, al requerir menos mano de obra en su montaje, a los menores requisitos auxiliares necesarios para la habilitación del espacio necesario y a unos gastos de conservación y mantenimiento sensiblemente menores.

Como desventajas tenemos que este tipo de ascensor no es recomendable para salvar grandes alturas o en aquellas ubicaciones donde se le exija una utilización intensiva, si no que más bien se trata de una opción muy recomendable para uso particular en todo tipo de viviendas o en edificios o comercios, donde no se prevea una alta utilización y con número de paradas y metros de recorrido bajo.

Otras opciones serían los elevadores verticales de corto recorrido y los salvaescaleras, tanto sillas como plataformas.

Por un lado el elevador vertical es ideal para salvar alturas de como máximo 3 metros, siendo muy utilizado para salvar las escaleras situadas en los accesos de muchos edificios residenciales y comercios o en viviendas particulares donde se trata de salvar una única planta de altura.

Este tipo de elevador destaca por su gran versatilidad, ya que es una solución que otorga plena accesibilidad a personas que se desplazan en silla de ruedas o a aquellas que aunque puedan caminar, subir y bajar escaleras les pueda resultar complicado debido a una edad avanzada o algún tipo de problema de movilidad reducida.

En cuanto a sus inconvenientes, tenemos que indicar que solo permiten salvar pequeñas alturas inferiores a los tres metros y que de la misma manera que los ascensores, requieren de un espacio habilitado específico para su instalación.

Por último, tenemos los salvaescaleras, cuyas principales ventajas son su precio, la adaptabilidad que hace que puedan instalarse en prácticamente cualquier tipo de escaleras y la no necesidad de realización de obras o reformas al instalarse directamente en la propia escalera de una manera rápida.

En contrapartida, pueden no ser la mejor opción cuando se trata de salvar un recorrido muy largo, tres plantas de altura o más, y que aunque los sistemas de guiado han mejorado muchísimo fabricándose totalmente adaptados a la forma y recorrido de la escalera, estos se instalan en la escalera ocupando unos centímetros, lo que puede afectar a la estética y es necesario tener en cuenta.